El golpe de riñón es la forma de sumergirse para alcanzar el fondo. Puede hacerse apoyando una aleta en la superficie (a la pescadora) o con las dos aletas juntas. Es la forma de vencer la flotabilidad positiva que tenemos en la superficie.
¿Cómo lo realizamos? En posición horizontal en la superficie cogemos cierta inercia hacia delante e inclinamos 90º el cuerpo hacia el fondo, seguidamente las dos piernas se levantan hasta alcanzar la verticalidad total. De este modo el cuerpo se introduce totalmente en el agua haciendo que podamos empezar a aletear hacia el fondo.